lunes, noviembre 13, 2006

Las pruebas


Uno de los principales temores que tengo como sumisa es el de defraudar a mi Amo. No por miedo a un castigo o porque no esté segura de lo que deseo ser en la vida o de mi capacidad de sumisión, ni mucho menos porque mi Dueño mantenga una exigencia por encima de lo aceptable, sino porque, algunas veces, nuestras circunstancias no son las mejores posibles. El hecho de estar a muchos kilómetros de distancia abre la posibilidad de que mi Amo no puedo disfrutar de las satisfacciones que tiene derecho a obtener del uso de su sumisa. Hemos hablado de esto y siempre me ha dicho que está plenamente seguro de que mi comportamiento se ajusta a lo que él espera de mí, confianza que en lo que se refiere a mi obediencia, está totalmente justificada. Para mí es una relación por completo satisfactoria y estoy logrando hacer de la sumisión una forma de vida, pero no estoy segura de que también lo sea para él que no ve más que hasta cierto punto esa evoluvión mía.
Hace más o menos un mes mi Amo me preguntó si me gustaría ser su esclava y yo sentí que se me desbocaba el corazón y que me hallaba en lo más profundo de un sueño maravilloso. Naturalmente, le dije que sí, no sólo porque es lo que más deseo en este momento, sino porque me considero capacitada para asumir ese papel de esclava.
Mi Amo me respondió que me iba a poner tres pruebas, no para hacerme un examen, sino para que yo misma pudiese valorar mi predisposiciópn a ser su esclava, para que supiera si era capaz o no.
La primera prueba fue bastante fácil y creo que la superé con creces. Me sentí capacitada para cumplir sus instrucciones, no una vez o un día, sino siempre que mi Señor me lo mande.
La segunda prueba fue mucho más complicada pero, de forma paradójica, puedo asegurar que me sentí feliz de ser usada de esa manera y de poder cumplir todas las exigencias. Pedí permiso a mi Amo prácticamente para cualquier movimiento y estuve sometida a su albedrío durante veinticuatro horas.
La tercera prueba ha constituido un auténtico drama para mí. Mi Amo me ha mandado hacer algo que como sumisa debo hacer, pero que va contra mis propias convicciones. Y ese es un gran problema. Sé que si no me siento capaz de cumplir sus instrucciones no me aceptará como esclava, que incluso mi presente como sumisa quedaría en entredicho. Pero también sé que no quiero volver atrás ni detener mi progresión ni, mucho menos, empezar de nuevo. Mi Señor me asegura que no es el hecho de cumplir o no cumplir lo que importa, sino mi propia actitud, el saber que una esclava no discute el deseo de su Dueño. Y en mi cabeza empieza a revolotear el presentimiento de haber llegado al final, no a la meta porque no hay meta, sino a un imaginario tope que me obligará a salirme del camino. Y lo peor de todo es que apenas tengo tiempo porque el tiempo del que disponía se está consumiendo ya.

Gracias mi Amo por permitirme exprersarme libremente y gracias por confiar tanto en su sumisa.

Fotografia tomada de pigdog.tv

5 Comments:

Blogger Princesa said...

Mi querida silvia{T}, si en algo te puedo ayudar... aunque sea hablando para que encuentres tu camino y el valor que hace falta para saltar... no lo dudes, por favor.
Nosotras mismas somos el principal obstaculo en nuestra entrega.
Cuenta conmigo para cualquier cosa, desde un cafe a un abrazo!
Mil besos.

11:25  
Blogger Tarha said...

No hay camino sin retorno,ni viaje por corto que sea que no tenga su reposo.Las ansias por llegar nunca fueron buenas consejeras pues nos hablan de atajos que no existen.
No te amargues si aun no ves que aun te falta mucho que andar,mejor alegrate por poder seguir disfrutando del viaje y de la experiencia;recuerda "si vas a Itaca pide que tu viaje sea largo".
Tarha.

17:12  
Blogger Nuyum said...

silvia{T} no te angusties por esa prueba,tu alma sumisa te empujara a efectuarla, no pienses que es el fin de un camino, es el inicio, estas como dice tu Amo en el camino a Itaca, disfrutalo.un beso enorme.

18:43  
Blogger Silvia said...

su zorra, gracias por tu respuesta. Ya solo con saber que estás ahi dispuesta a ayudarme con mi problemas sirve para que parezcan menos importantes

nuyum, estoy cerca de pasar esa prueba. Gracias por tu ayuda.

Amo, usted sabe que mi ánimo es grande y que no me rindo fácilmente. Espero poder pasar su prueba para continuar mi camino.

22:35  
Blogger Gustab said...

silvia eres una esclava de merecer,
si yo fuera tu amo, jamás te dejaría ir.
Se mía el deseo merece ser bien tratado.

19:32  

Publicar un comentario

<< Home